viernes, 21 de enero de 2011

FALSAS IDEAS DEL ISLAM Y LOS MUSULMANES

Traduce: Omar Ribas
Fuente: http://www.islaam.ca/

Idea falsa número uno: Los musulmanes adoramos a un Dios diferente:


Hay sólo un Dios Único que creó el universo y a toda la humanidad. A través de la historia, la gente ha creado falsos dioses en sus mentes y ha tenido falsas ideas acerca de Dios Todopoderoso, pero a pesar de ello, sólo hay un Único Dios Verdadero –y sólo Él es merecedor de adoración. Desgraciadamente, algunos no-musulmanes creen icorrectamente que los musulmanes adoramos a un Dios diferente que los judíos y los cristianos. Esto puede ser debido a que los musulmanes nos referimos algunas veces a Dios como "Allah", pero también porque a lo largo de los siglos ha habido muchas mentiras y distorsiones propagadas por los enemigos del Islam. En realidad, los musulmanes adoramos al Dios de Noé, Abraham, Moisés y Jesús, la paz sea con todos ellos –el mismo Dios que el de los cristianos y los judíos. La palabra "Allah" es simplemente el nombre árabe de Dios Todopoderoso (mencionado para la humanidad en el Corán) y es la misma palabra que los cristianos y los judíos araboparlantes utilizan para referirse a Dios. Si tomáis una traducción árabe de la Biblia cristiana, veréis la palabra "Allah" dónde se utiliza "Dios" en castellano. Pero incluso aunque los musulmanes, judíos y cristianos creamos en el mismo Dios, sus conceptos sobre Él difieren un poco. Por ejemplo, los musulmanes rechazamos la idea de la Trinidad o que Dios se haya "encarnado" en el mundo. También, las enseñanzas del Islam no dependen de o llaman al "misterio" o a la "paradoja" –son directas y claras.


El Islam enseña que Dios es Misericordioso, Amante y Compasivo y que no necesita convertirse en hombre (ni los hombres necesitan que lo haga). Uno de los aspectos únicos del Islam es que enseña que el hombre puede tener una relación personal y plena con Dios Todopoderoso sin implicar la trascendencia de Dios. En el Islam no hay ambigüedad en la Divinidad –Dios es Dios y el hombre es hombre. Los musulmanes creemos que Dios es el Más Misericordioso, y que trata directamente con los seres humanos sin la necesidad de ningún intermediario. En realidad, la fórmula "en el Nombre de Dios, el Misericordioso, el Compasivo" es una de las aleyas más repetidas en el Sagrado Corán. Además, las enseñanzas puras y directas del Islam exigen que nos aproximemos a Dios Todopoderoso directamente y sin intermediarios. Porque los musulmanes creemos que Dios tiene completamente el control sobre todas las cosas y Él puede derramar Su gracia y misericordia sobre Sus criaturas como quiera –sin que sean necesarias expiación, encarnación o sacrificio de sangre.


En resumen, el Islam llama a la gente a someterse al Único Dios Verdadero y a adorarle solamente a Él.


Idea falsa número dos: Los musulmanes adoramos a Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz


De acuerdo con la creencia islámica, el Profeta Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, fue el último Mensajero de Dios. Él, como todos los profetas y mensajeros –como Noé, Abraham, Moisés y Jesús, la paz sea con todos ellos- era sólo un ser humano. Los cristianos tienen la falsa concepción que los musulmanes adoramos a Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, formulando una analogía incorrecta, porque como ellos adoran a Jesús, la paz sea con él, creen que nosotros hacemos lo propio con Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz. Esta es una de las razones por las cuales han llamado a los musulmanes con el nombre incorrecto de "mahometanos" durante muchos años.


Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, como Jesús, la paz sea con él, nunca reclamó para él la posición divina. Llamó a la gente a adorar sólo a Dios Todopoderoso, y continuamente remarcó su humanidad para que la gente no cayera en los mismos errores que los cristianos cometieron con respecto a Jesús, la paz sea con él. Para evitar su deificación, el Profeta Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, siempre dijo que se refirieran a él como "el Mensajero de Dios y Su siervo". Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, fue escogido para ser el último mensajero de Dios para comunicar el mensaje no sólo en palabras sino para ser un ejemplo vivo del mensaje. Los musulmanes lo amamos y respetamos porque fue del carácter moral más elevado y trajo la Verdad de Dios, que es el Monoteismo Puro del Islam (Tawhid). Incluso cuando el Islam estaba en sus estadios iniciales, Dios reveló que Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, "fue enviado como una misericordia para la humanidad", informándonos que el mensaje del Islam sería muy extendido. Los musulmanes nos esforzamos en seguir el gran ejemplo de Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, pero no lo adoramos de ninguna manera.


Además, el Islam enseña a los musulmanes a respetar a todos los profetas y mensajeros de Dios, pero respetarlos y amarlos no implica adorarlos. Todos los musulmanes verdaderos se dan cuenta que toda adoración y oración deben ser dirigidas únicamente a Dios. Es suficiente con decir que adorar a Muhámmad, que Allah le bendiga y le dé paz, o a cualquier otro, juntamente con Dios se considera el peor pecado en el Islam. Incluso si una persona pretende ser un musulmán, pero adora y reza a otro que Dios Todopoderoso, esto cancela y anula su Islam. La Declaración de Fe del Islam deja claro que a los musulmanes se les enseña a adorar sólo a Dios. Esta Declaración es como sigue, "No hay nada que merezca ser adorado excepto Dios, y Muhámmad es el Mensajero y el Siervo de Dios".


Idea falsa número tres: El Islam es una religión sólo para los árabes

La manera más rápida de probar que esto es completamente falso es señalar el hecho que sólo entre el 15 y el 20% de los musulmanes del mundo son árabes. Hay más musulmanes indios que musulmanes árabes, y más musulmanes indonesios que musulmanes indios. Creer que el Islam es sólo una religión para los árabes es un mito que fue propagado por los enemigos del Islam ya en los primeros días de su historia. Este presupuesto falso está basado posiblemente en el hecho que la mayoría de la primera generación de musulmanes fueron árabes, que el Corán fue escrito en árabe y el Profeta Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, era árabe. Sin embargo, tanto las enseñanzas del Islam como la historia de su expansión muestran que los primeros musulmanes hicieron un esfuerzo para propagar su mensaje de Verdad a todas las naciones, razas y pueblos.


Además, hay que aclarar que no todos los árabes son musulmanes y no todos los musulmanes son árabes. Un árabe puede ser musulmán, cristiano, judío o ateo, o de cualquier otra religión o ideología. También, muchos países que algunos consideran como "árabes" no lo son en absoluto –como Turquía e Irán. La gente que vive en esos países habla lenguas diferentes del árabe, que son sus lenguas maternas, y tienen una herencia étnica distinta de los árabes. Es importante darse cuenta que desde los inicios de la misión del Profeta Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, sus seguidores provinieron de un amplio espectro de orígenes étnicos –estaban Bilal, el exesclavo africano, Suhaib, el bizantino, Ibn Sailam, el exrabino judío, y Salmán, el persa. Dado que la verdad religiosa es eterna y que no cambia, y que la humanidad es una hermandad, el Islam enseña que las revelaciones de Dios Todopoderoso a la humanidad siempre han sido consistentes, claras y universales.


La Verdad del Islam es para toda la gente independientemente de la raza, nacionalidad o adscripción lingüística. Echar una ojeada al mundo islámico, de Nigeria a Bosnia y de Malasia a Afghanistán, es suficiente para demostrar que el Islam es un mensaje universal para la humanidad, sin mencionar el hecho significativo de que muchos europeos y americanos –del Norte, Centro y Sur- de todas las razas y orígenes étnicos están entrando en el Islam.


Idea falsa número cuatro: el Islam degrada a las mujeres.


Incluso a pesar de que muchos aspectos del Islam son falsamente comprendidos por los no-musulmanes, la ignorancia, desinformación y concepciones incorrectas, las más severas son referentes al trato del Islam con las mujeres. Numerosas aleyas del Corán dejan claro que los hombres y las mujeres son iguales ante Dios. Según las enseñanzas del Islam, la única cosa que distingue a la gente ante Dios es su nivel de conciencia de Dios. Debido a esto, mucha gente se sorprende cuando descubre que la Ley islámica garantizó derechos a las mujeres hace 1400 años que recientemente han obtenido las mujeres de Europa y América.


Por ejemplo, el Islam enseña claramente que la mujer es una persona completa a efectos legales, y es el equivalente espiritual del hombre. También, de acuerdo con la ley islámica, las mujeres tienen derecho a tener propiedades, tener su negocio y recibir el mismo salario por su trabajo que los hombres. Se permite a las mujeres un control total sobre su riqueza, no puede ser obligada a casarse contra su voluntad y el matrimonio se disuelve en el caso de negligencia o malos tratos. También, el Islam no considera a la mujer como una "tentadora malvada", y no culpa a la mujer por el "pecado original".


Las mujeres en el Islam practican los mismos actos de adoración que el hombre. En realidad, los derechos que el Islam dio a las mujeres hace unos 1400 años fueron inauditos en América hasta casi el siglo XIX. Hace menos de cincuenta años en Inglaterra y Estados Unidos una mujer no podía comprar una casa o un coche sin la firma de su padre o marido. Además, el Islam concede un gran respeto a las mujeres y su papel en la sociedad, les da el derecho a tener propiedades, casarse con quién quiera y otros. Hay que mencionar que la misión del Profeta Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, paró muchas de las prácticas horribles respecto a las mujeres que estaban presentes en la sociedad. Por ejemplo, el Corán puso fin a la práctica árabe pagana de matar a las niñas –como aún ocurre en India entre los hindúes o en China entre los no-musulmanes- cuando nacían. Además, el Islam puso restricciones a la poligamia sin límites de los árabes de su tiempo, y puso muchas leyes para el bienestar de las mujeres.


Hoy en día, la mayor parte de las llamadas reformas en la situación de las mujeres han venido después que en Occidente se abandonara la religión por el laicismo. Incluso aquellos que en Occidente se consideran parte de la llamada "tradición judeocristiana" en verdad siguen los valores del liberalismo occidental –pero sólo en un grado menor que sus compatriotas más liberales. Si las mujeres en el mundo islámico actual no tienen sus derechos, no es a causa del Islam. El problema es que en muchos lugares tradiciones e ideas ajenas al Islam han eclipsado la legislación islámica, ya sea bajo el impacto de la ignorancia o la colonización.


Idea falsa número cinco: Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, escribió el Corán.


Al tratar esta idea falsa, es interesante que ninguna otra escritura de la humanidad reclama ser la palabra directa del Todopoderoso en su totalidad, tan clara y repetidamente como el Sagrado Corán. Como Dios dice claramente en el Corán: "si hubiera sido escrito por el hombre, habríais encontrado muchas discrepancias en él". En el tiempo en que el Corán fue revelado, los árabes reconocieron que el lenguaje del Corán era único y que era distinto con diferencia del lenguaje usado normalmente por el Profeta Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz. Los árabes de esa época, asimismo, fueron conocidos por su bella poesía y Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, era conocido por ser un hombre iletrado.


Dios dice claramente en el Corán que Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, era incapaz de leer y escribir, y si no fuera verdad, ciertamente sus contemporáneos habrían protestado y lo hubieran rechazado. Sin embargo, no hay informaciones de esto. Ciertamente había gente que rechazaban el mensaje de Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, como fueron rechazados los demás profetas, pero nadie por esta razón. Al contrario, Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, tuvo centenares de seguidores leales y los resultados de sus esfuerzos fueron la expansión de España a China en sólo un siglo. También es interesante señalar que incluso cuando el Corán no sea poesía, los árabes fueron dejando de escribir poesía cuando el Corán fue revelado. Hay que decir que el Corán es la pieza de literatura árabe por excelencia, y los contemporáneos de Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, se dieron cuenta que no podían igualarlo.


Además, es fácil demostrar que Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, no tenía la mayor parte de conocimientos expuestos en el Corán, como conocimientos de hechos históricos, profetas anteriores y fenómenos naturales. Dios dice varias veces en el Corán que Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, y su gente no conocía estas cosas, y, de nuevo, si no hubiera sido verdad, sus contemporáneos hubieran rechazado estas afirmaciones. Es suficiente decir que no sólo el Corán es la escritura más memorizada y bien preservada en la tierra, sino que no tiene igual en elocuencia, impacto espiritual, claridad de mensaje y la pureza de su verdad.


Idea falsa número seis: el Islam se propagó por la espada.

Muchos no-musulmanes, cuando piensan en el Islam, representan a fanáticos religiosos en camello que llevan una espada en una mano y el Corán en la otra. Este mito, que se popularizó en Europa durante las Cruzadas, no tiene fundamento alguno. Antes que nada, Dios dice en el Corán "no hay compulsión en la religión". Añadimos que el Islam enseña que la fe de una persona tiene que ser pura y sincera, así que no es algo a lo que nadie pueda ser forzado. Al desacreditar el mito que el Islam fue "propagado por la espada", el historiador De Lacy O'Leary (que no era musulmán) escribió: "La historia deja claro, sin embargo, que la leyenda de musulmanes fanáticos actuando dogmáticamente y forzando el Islam a punta de espada sobre las razas conquistadas es uno de los mitos fantásticos más absurdos que los historiadores nunca hayan aceptado" (Islam at the Crossroads, Londres, 1923, pág.8). Hay que saber también que los musulmanes gobernaron España cerca de 800 años. Durante ese tiempo, y hasta que fueron expulsados, vivían entre ellos no musulmanes que prosperaron. Además, minorías cristianas y judías han sobrevivido en las tierras musulmanas de Oriente Medio durante siglos. Países como Egipto, Marruecos, Palestina, Libano, Siria y Jordania tienen poblaciones cristianas y/o judías. Si se supone que el Islam enseñó que hay que matar o forzar a esa gente para que se hagan musulmanes, ¿cómo sobrevivieron todos esos no musulmanes durante tantos siglos en medio del territorio islámico? Además, si consideramos el pequeño número de musulmanes que inicialmente propagaron el Islam de España y Marruecos por el lado occidental a India y China por el oriental, nos daremos cuenta que eran demasiado pocos para forzar a la gente a pertenecer a una religión contra su voluntad. Además, el sistema de gobierno y la civilización que establecieron los musulmanes gozaban de un gran poder de legitimidad, sus ciudadanos estaban orgullosos de él. La expansión del Islam contrasta con las acciones de los seguidores del cristianismo, que desde el tiempo del emperador Constantino hicieron uso libre de la espada, a menudo basando su conducta en versículos bíblicos. Esto fue especialmente verdad en la colonización de América Latina y África, donde los pueblos indígenas fueron sistemáticamente eliminados o forzados a convertirse. También es interesante constatar que cuando los mongoles invadieron y conquistaron vastas partes del califato islámico, en vez de destruir la religión, la adoptaron. Este es un caso único en la historia –los conquistadores adoptan la religión de los conquistados. Como eran los vencedores, no pudieron ser forzados a convertirse en musulmanes. El país musulmán más grande hoy en día es Indonesia, y nunca hubo batallas allí. ¿Cómo puede forzarse a alguien a aceptar una religión que recompensa espiritualmente y exige tanto como el Islam?

Idea falsa número siete: Los musulmanes odian a Jesús, la paz sea con él.


Muchos no musulmanes están sorprendidos al descubrir que según la creencia islámica, Jesús, la paz sea con él, el hijo de María, es uno de los mayores mensajeros de Dios. Los musulmanes aprenden a amar a Jesús, la paz sea con él, y una persona no puede ser musulmana sin creer en la inmaculada concepción y los milagros de Jesús, la paz sea con él. Los musulmanes lo creemos no por la Biblia o lo que diga cualquier otra religión, sino simplemente porque el Sagrado Corán dice estas cosas de él. Sin embargo, los musulmanes siempre remarcamos que los milagros de Jesús, y todos los demás profetas, la paz sea con todos ellos, se producieron por el permiso de Dios. Habiendo dicho esto, muchos cristianos no creen que Jesús, la paz sea con él, sea el "hijo de Dios", "Dios encarnado" o la "Segunda persona" de la Trinidad. Dios dice claramente en el Sagrado Corán que Dios Todopoderoso no tiene un hijo, ni alegóricamente, físicamente, metafóricamente o metafísicamente. El Monoteísmo Puro del Islam (Tawhid) rechaza la noción de "definir" a Dios (que es básicamente lo que hace la doctrina de la Trinidad), diciendo que nada es como Dios, o que no se puede rezar a nada que no sea Dios. También, el Islam enseña que los nombres "Señor" y "Salvador" son exclusivamente para Dios. Para evitar las falsas ideas, hay que aclarar que cuando los musulmanes criticamos a la Biblia o las enseñanzas del cristianismo, no estamos atacando el concepto de "Palabra de Dios" o a Jesús, la paz sea con él. Desde el punto de vista islámico, defendemos la Palabra de Dios y a Jesús, la paz sea con él. El objetivo de los musulmanes es cuestionar algunos escritos que se consideran Palabra de Dios, porque los musulmanes no aceptamos que realmente sean la Palabra de Dios en su conjunto. Creemos que en la Biblia hay fragmentos que son la Palabra de Dios y fragmentos que son obra de los escribas bíblicos, y que están mezclados. Además, doctrinas cristianas tales como la Trinidad y la Remisión de los pecados no son aceptadas por los musulmanes porque precisamente no tienen su origen en las palabras de Jesús, la paz sea con él. De esta manera, los musulmanes nos consideramos los verdaderos seguidores de Jesús, la paz sea con él, porque lo defendemos de las exageraciones que se han hecho entorno a su persona y enseñamos el Monoteísmo puro que predicó el mismo Jesús, la paz sea con él.


Idea falsa número ocho: El Islam es fatalista.

La mayoría de musulmanes se extrañan que su religión, que posee un bello equilibrio entre fe y acción, pueda ser acusada de ser "fatalista". Quizá esta falsa idea viene de que los musulmanes decimos "¡Alabado sea Dios!" cuando algo bueno o malo ocurre. Esto es porque los musulmanes sabemos que todo viene de Dios, que es el Sostenedor Omniscente del universo, y dado que el musulmán debe depender completamente de Dios, lo que ocurra es para su bien. Sin embargo, esto no significa que los musulmanes no tengamos una postura activa ante la vida, la verdad es lo opuesto. El Islam no sólo exige fe, sino acción: oración regular, ayuno y esfuerzo en el camino de Dios. Para ser más precisos, en el Islam las acciones forman parte de la fe. El Islam rechaza completamente las creencias extremas de algunas religiones que enseñan que no se debe acudir al médico cuando se está enfermo, sino rezar a Dios para que te cure. La perspectiva islámica es muy positiva, puesto que enseña que los seres humanos pueden tener una actitud positiva ante esta vida. Esto enseñó el Profeta Muhámmad, que Dios le bendiga y le dé paz, a sus seguidores, que obviamente fueron activos para expandir el Islam por el mundo en un período relativamente breve de tiempo. Incluso cuando el Islam enseña que Dios sabe lo que harán los seres humanos antes de que lo hagan, estos todavía tienen libre albedrío. Ciertamente Dios, que es Omnisciente, sabe lo que le va a ocurrir a todo el mundo antes de que le ocurra. Negar esto es negar al mismo Dios. A pesar de esto, si los seres humanos no tuvieran libre albedrío, sería ridículo e injusto por parte de Dios ordenar que hagan ciertas cosas y que eviten otras. Lejos de ser fatalista, el Islam enseña que el principal propósito en la vida del hombre es ser consciente de Dios. Debido a esto, los musulmanes se preocupan menos de las cosas materiales y ven su vida en este mundo desde la justa perspectiva. Esto se debe al hecho que el Islam enseña claramente que si la gente adora y depende solamente de Dios Todopoderoso, no tiene nada de qué preocuparse, porque Dios quiere lo mejor para ellos. La verdadera libertad, en la perspectiva islámica, no significa seguir los deseos humanos de comida, bebida y sexo sin orden. Al contrario, la libertad significa ser capaz de controlar los bajos instintos de la persona y realizarlos de una manera adecuada y correcta a los ojos de Dios. Esto pone en sintonía los deseos de la persona con lo que Dios quiere de nosotros, y sólo entonces una persona es verdaderamente libre.

Idea falsa número nueve: La amenaza islámica.


El los últimos años (especialmente tras los atentados del 11-S de 2001) se ha prestado una gran atención en los medios de comunicación occidentales a la amenaza del "fundamentalismo islámico". Desgraciadamente, debido a una mezcla distorsionada de informaciones tendenciosas en los medios de comunicación occidentales y a las acciones de algunos musulmanes ignorantes, la palabra "Islam" se ha convertido casi en sinónimo de terrorismo. Sin embargo, si se analiza la situación la pregunta que nos viene a la mente es: ¿las enseñanzas del Islam apoyan el terrorismo? Respuesta: ¡Definitivamente NO! El Islam prohíbe totalmente los actos terroristas. Hay que recordar que todas las religiones tienen sectas y seguidores desviados, por lo que debemos acudir a sus enseñanzas, y no a las acciones de unas pocas personas. Por desgracia, en los medios de comunicación, cuando un musulmán comete un acto atroz es etiquetado inmediatamente como "terrorista islámico". Sin embargo, cuando los serbios asesinaron o violaron a mujeres inocentes en Bosnia, nadie los llamó "terroristas cristianos", ni fueron llamadas las actividades del IRA en Irlanda "terrorismo católico". También, cuando los extremistas derechistas en Estados Unidos ponen bombas en clínicas abortistas, no se habla de "terroristas cristianos". Reflexionando sobre estos hechos, uno puede concluir definitivamente que hay un doble rasero en los medios de comunicación para medir los actos de los musulmanes y los demás seres humanos. A pesar de que los sentimientos religiosos desempeñen un papel significativo en los previamente mencionados conflictos cristianos, los medios de comunicación no les ponen etiquetas religiosas porque presuponen que estos actos bárbaros nada tienen que ver con las enseñanzas del cristianismo. Sin embargo, cuando pasa cualquier cosa en la que está implicado un musulmán, se culpa al Islam de ello, y no a la persona desviada. Es verdad que la Ley islámica permite la defensa armada en unas circunstancias determinadas. [Todos los pueblos y religiones del mundo han tenido y tienen ejércitos y se han defendido de ataques exteriores. Es más, las personas que han defendido a su patria o a su religión son tienen un sitio de honor y respeto en todas las partes del mundo. En España se respeta a personas como Agustina de Aragón que combatió a los franceses en la Guerra de la Independencia, en América Latina a los próceres como José Ribas en Venezuela o a José Martí en Cuba. En Francia se honra a los héroes de la resistencia contra la ocupación alemana de la II Guerra Mundial y en Estados Unidos a los héroes de la Independencia, y así en todos los países del mundo] Pero el Islam condena los ataques contra la gente inocente. La palabra árabe "yihad", que se traduce habitualmente como "guerra santa" significa simplemente "esfuerzo". La palabra árabe para "guerra" es "harb", no "yihad". "Luchar", es decir, "hacer el yihad" para defender el Islam y los musulmanes está permitido [Todas las constituciones del mundo tienen el principio de recurrir a las armas si su país es atacado, es más, incluso la ONU lo considera un principio de derecho internacional] . Sin embargo, tales actividades hay que llevarlas a cabo según los principios del Islam y la guía del líder político del Estado y los sabios. El Islam prohíbe claramente "tomarse la ley por su mano", lo que significa que un musulmán no puede decidir cuando matar, castigar o tomar las armas. El juicio y el castigo dependen de la autoridad política legítima y de los jueces. También, cuando observamos los acontecimientos en los países islámicos, hay que tener en cuenta que hace muy poco que terminó un largo período de colonialismo. Durante esa época, los musulmanes fueron cultural, material y religiosamente explotados. Este período ha sido sucedido por uno de serios equilibrios internacionales, en el que verdaderamente tres o cuatro Estados tienen un poder real de decisión en el mundo. [Y esto ha creado grandes desestructuraciones sociales y políticas, no solo en los países islámicos, sino en muchos de los llamados despectivamente "países del Tercer Mundo", en los que ha surgido la violencia, como Haití, Colombia, Nepal, Sri Lanka, Congo, y un largo etcétera] También, el los medios de comunicación se hace creer a los occidentales que tiranos como Saddam Hussein o Muammar el Ghaddafi son "líderes islámicos", cuando la verdad es que son justo lo contrario. Ninguno de estos líderes tiránicos profesa el Islam como ideología, sino que utilizan proclamas islámicas para manipular a sus poblaciones indefensas. Tienen tanto que ver con el Islam como Hitler con el cristianismo. En realidad, en muchos de los países de mayoría musulmana el Islam es perseguido. El terrorismo y matar a inocentes contradicen claramente las enseñanzas del Islam.

NOTA: .


El musulmán, NO puede matar ni en la guerra ni en la paz a:


Mujeres


Niños


Ancianos


No combatiente

Es decir que solo puede enfrentar a combatientes, a soldados y sólo si una autoridad islámica incuestionable lo indica, no por iniciativa propia. El combate es defensivo, es valido para musulmanes como para cualquiera, defender su tierra y su familia ente cualquier amenaza. Las huestes musulmanas no lucharon solo por ellos en el pasado, sino que también protegían a judíos y cristianos que habitaban en territorios islámicos. Además, las campañas islámicas fueron por razones religiosas, que establecen una serie de normativas, por ejemplo, no destruir las cosechas, ni dañar a los animales etc. Los musulmanes estuvieron ocho siglos en España, y nunca obligaron a los españoles a cambiar de religión o de idioma. En algunos países Islámicos, viven judíos y cristianos en completa armonía.


Es lamentable ver como solo los musulmanes son discriminados por su religión. Si un violador abusa de una mujer, nadie cuestiona cual es su religión, si alguien roba o asesina, nadie pregunta o señala su religión.


El musulmán, NO puede suicidarse, el Islam lo prohíbe.

domingo, 2 de enero de 2011

LA REGLA SOBRE LA MAGIA Y LA ADIVINACIÓN DE LA FORTUNA

Preparado por Abdul Aziz Ibn Baz.
Traducido (del árabe al inglés) por: un equipo de especialistas bajo la supervisión del editor.
Dar Al-Watan Publishing House.
Traducido del (inglés al español) por: Musa Abdullah Reyes
Para: http://www.islammexico.net/

Toda la alabanza es debida a Alláh, el Perdonador de Pecados, El Aceptador del Arrepentimiento; que Él mande salutaciones y exalte la mención del sello de todos los Profetas y Mensajeros, nuestro Profeta Muhammad, su familia y todos sus Compañeros.

Debido al incremento en el número de magos y adivinos últimamente, aquellos
quienes claman la habilidad de curar a la gente por el uso de la magia y la
adivinación de la fortuna, y debido a su difusión en algunos de los países
musulmanes y la vía de la que ellos toman ventaja de la gente de mente simple e
ignorante; se vuelve necesario para mí el clarificar el gran peligro de esta gente
sobre los musulmanes y el Islam, porque ello supone el volverse atado a otro que
Alláh y desobedecer sus órdenes y la orden del Profeta ( .(صلى الله عليه وسلم
Es permisible buscar tratamiento de alguna enfermedad, y un musulmán puede ir a un médico por un diagnóstico para cualquier tipo de enfermedad y usar los tratamientos islámicamente requeridos como legales (y) prescritos para ello. Esto es un término el cual no contradice la dependencia sobre Alláh y Alláh es Aquel
Quien creó la enfermedad tanto como sus curas. Él garantizó el conocimiento de estas curas a quienquiera que Él desea, y no puso las curas en nada de lo cual Él prohibió. Por lo tanto, no es permisible para una persona enferma el buscar la ayuda de los adivinos de la fortuna quienes claman (que tienen) el conocimiento de lo No Visto.

Abu Hurayrah ( رضي الله عنه ) narró que el Profeta ( صلى الله عليه وسلم ) dijo:
“Quienquiera que va a un mago o un adivino y cree en lo que él le dice,
descree en lo que ha sido revelado a Muhammad” (Ahmad). El Profeta ( صلى
الله عليه وسلم ) también dijo: “Quienquiera que va a un decidor de la fortuna o a
un adivino y lo consulta, su oración no será aceptada por cuarenta días”
(Muslim). Imrán Ibn Husayn ( رضي الله عنه ) narró que el Profeta ( (صلى الله عليه وسلم
dijo: “no es de nosotros quien cree en los augurios malvados o talismanes,
quien va con un adivino, o va con un hechicero. Quienquiera que va con un
adivino y cree en lo que él le dice, ha descreído en lo que ha sido revelado
sobre Muhammad ( صلى الله عليه وسلم )” (Al-Bazar).

Estas narraciones advierten contra ir a los adivinos, decidores de la fortuna o
magos, pidiéndoles o creyendo lo que ellos dicen. Uno no debería ser engañado
por el hecho de que algo de lo que dicen es verdad, ni debería ser engañado
cuando vean el gran número de gente quien busca su busca su ayuda. Estas masas
son ignorantes y no deberían ser un ejemplo a imitar. El Profeta ( (صلى الله عليه وسلم
prohibió acudir a ellos o creer en sus palabras debido a la gran maldad resultante
de esta gente y porque ellos son mentirosos.

Las narraciones también indican la incredulidad de los decidores de la fortuna
y magos porque ellos claman el conocimiento de lo No Visto, y esto es un claro
acto de incredulidad. Esta gente no puede lograr sus objetivos sin la ayuda del
Yinn a quien ellos adoran junto a Alláh; y aquel quien les cree en su reclamo de
conocer lo No Visto es exactamente como ellos, y el Profeta ( صلى الله عليه وسلم ) lo
desconoce. Un musulmán no debería someterse a lo que ellos claman como su
tratamiento, tal como los sonidos zumbantes que ellos hacen y las palabras que
ellos usan las cuales son como cribas, y otras cosas que ellos hacen, alguien
quien acepta lo que ellos hacen está, de hecho ayudándolos en su falsedad e
incredulidad.

Es también prohibido para cualquier musulmán el ir ante ellos para preguntarles acerca de aquel con quien su hijo o padre debería casarse, o si serán o no una pareja feliz, porque tales cosas son de lo No Visto, lo cual solamente Alláh sabe. La magia es un acto prohibido de incredulidad, como Alláh dice con respecto a los dos ángeles: “Pero ninguno de estos dos (ángeles) enseñaron a nadie (tales cosas) hasta que ellos habían dicho: “Nosotros somos una prueba, así que no descrean (por aprender esta magia de nosotros)”. Y de estos (ángeles) la gente aprendió aquello por lo cual ellos causan la separación entre un hombre y su esposa, pero ellos no pudieron así, dañar a nadie, excepto por el Permiso de Alláh y ellos aprendieron aquello lo cual los daña y no los beneficia. Y efectivamente ellos supieron que los compradores de eso (la magia) no tendrían socio en el Más Allá. Y qué tan malo efectivamente fue, eso por lo cual ellos se vendieron a sí mismos, si ellos supieran” (Al-Baqarah: 102).

Este verso prueba que la magia es un acto de incredulidad y que los magos separan a un hombre de su esposa. También prueba que la magia no tiene un efecto real y que solo es Alláh, Aquel Quien causa año y puede beneficiar a la gente. Desafortunadamente, el daño de los magos, quienes heredaron este conocimiento de los politeístas, se ha incrementado y ellos fueron hábiles para engañar a la gente de mentalidad débil.

Este verso también prueba que aquellos quienes aprenden la magia actualmente, aprenden aquello lo cual los daña y no los beneficia, y que ellos no tendrán socio (en la recompensa) con Alláh en el Día del Resurrección. Esto es, efectivamente, una aterradora advertencia la cual indica la gran pérdida en esta vida y en el Más Alláh, y que esta gente se vendió a sí misma por el precio más bajo. Esto es porque Alláh los ha deshonrado diciendo: “Y qué tan malo efectivamente fue, eso por lo cual ellos se vendieron a sí mismos, si ellos supieran” (Al-Baqarah:102).

Alláh legisló para Sus esclavos cosas por las cuales ellos pueden protegerse a ellos mismos de la magia antes de que ello pase. Él también clarificó cómo ellos mismos pueden tratarse, fuera de su Misericordia y Bondad, y como una manera
de completar Sus Bondades. Las siguientes son algunas de estas maneras de protección contra la magia antes de que ello suceda, tanto como la cura para la magia después de que ello aflija a la gente usando vías islámicamente legales.

Una de las más importantes vías para prevenir la magia antes de que suceda es protegerse a uno mismo con el Corán y la suplica profética, como recitar el Verso del Trono (Ayat-ul-Kursi) donde Alláh dice: “Alláh, La ilaha illah Huwa (nadie tiene el derecho de ser adorado, excepto Él), Al Hayul Qayum (El Que siempre vive, Aquel Quien sostiene y protege todo lo que existe). Ni el sueño ni el dormir Lo rebasan. A Él pertenece todo lo que está en los cielos y todo lo que está sobre la tierra. Quien es aquel que puede interceder con Él excepto con Su Permiso. Él sabe lo que les sucede (a Sus criaturas) en este mundo, y lo que les pasará en la Otra Vida. Y ellos nuca abarcarán nada de Su Conocimiento excepto lo que Él desee. Su Kursi se extiende sobre los cielos y la tierra, y Él no siente fatiga en guardarlos y preservarlos. Y Él es el Más Alto y el Más Grande” (Al-Baqarah:255). Este verso debería ser recitado después de cada oración obligatoria, después de las suplicas regulares recomendadas, y también en el tiempo de sueño. Este verso es el verso más grande en el Corán entero.

También recitar: “Di (Oh Muhammad ( صلى الله عليه وسلم )): “Él es Alláh, (el)
Uno. Alláh (As-Samad); el Maestro Autosuficiente, a quien todas las
criaturas necesitan (Él no come ni bebe). Él no engendra ni fue engendrado”
(Al Ikhlas:1-4). “Di: busco refugio con (Alláh) el Señor del rayar del alba. De
la maldad de lo que Él ha creado. Y de la maldad de lo oscuro (la noche)
tanto como ello viene con su oscuridad (o la noche, tanto como ello se
coloque o se aleje. Y de la maldad de aquellos quienes practican la brujería
cuando ellos soplan en los nudos” (Al-Falaq:1-5). “Di: Yo busco refugio con
(Alláh) el Señor de la humanidad. El Rey de la humanidad; el Ilah (Dios) de
la humanidad. Del mal del susurro (del demonio que susurra maldad en los
corazones de los hombres) quien se aparta (de su susurrar en el corazón de
uno después de que uno recuerda a Alláh). Quien susurra en los pechos de la
humanidad. De los Yinn y de los hombres” (An-Nas:1-6). Una vez después de
cada oración obligatoria; pero tres veces después de las oraciones del alba y la
puesta del sol.

Aún más, uno debería recitar los dos últimos versos de Al-Baqarah, donde
Alláh dice: “El Mensajero de Alláh ( صلى الله عليه وسلم ) cree en lo que ha sido
enviado a él de su Señor, y (así hacen) los creyentes. Cada uno cree en Alláh,
Sus Ángeles, Sus Libros, y Sus Mensajeros. (Ellos dicen): “No hacemos
distinción entre uno u otro de sus Mensajeros”; y ellos dicen: “Nosotros
escuchamos y obedecemos. (Buscamos) tu perdón, nuestro Señor, y hacia Ti
es el retorno (de todo). Alláh no carga a una persona más allá de su alcance.
Él obtiene recompensa por todo (lo bueno) lo cual él ha ganado, y él es
castigado por esa (maldad) la cual él ha ganado. ¡Señor Nuestro! No nos
castigues si olvidamos o caemos en el error. ¡Señor Nuestro! No pongas
sobre nosotros una carga como aquella la cual pusiste sobre aquellos antes
que nosotros (judíos y cristianos); ¡Señor Nuestro! No nos pongas una carga
más grande de la fuerza que tengamos para soportarla. Perdónanos y
concédenos el perdón. Ten misericordia sobre nosotros. Tú eres nuestro
Mawlaa (Patrón, Soportador y Protector) y danos la victoria sobre la gente
incrédula” ” (Al-Baqarah:285-286).

El Profeta ( صلى الله عليه وسلم ) dijo: “Aquel quien recita el Ayat-ul-Kursi (el
verso del Trono) en la noche continuará siendo guardado por Alláh y Satán
no se acercará a él”. Él ( صلى الله عليه وسلم ) también dijo: “Ello es suficiente
(como una protección de todo mal) para una persona que recite los dos
últimos versos del capítulo Al-Baqarah en la noche”.

También ejerciendo esfuerzos extras en tomar refugio en las palabras perfectas
de Alláh de la maldad que Él ha creado durante el día o durante la noche, o
cuando él llega a un lugar nuevo (durante un viaje), sea por tierra, aire o mar,
como el Profeta ( صلى الله عليه وسلم ) dijo: “Aquel quien llega a un lugar (para
descansar durante el viaje) y dice: “Audhu bi Kalimat ilah-it-Tamat min
sharri ma Khalaq” (Yo tomo refugio en las perfectas palabras de Alláh del
mal que él ha creado) no será dañado hasta que él parta de ese lugar” ”.

El Profeta ( صلى الله عليه وسلم ) nos animó a decir tres veces en la parte temprana del
día (antes del amanecer) y en la tarde: “Bismilláh-illadhi la yaduru ma ismihi
shayun fil-ardi wa la fi samawati wa huwas-Sami-ul-Alim” (Por el nombre de
Alláh con cuyo nombre nada es dañado sobre la tierra ni en los cielos, y Él es el
Que Todo lo Oye, el Que Todo lo Sabe); y dijo que estas palabras lo protegerán
de todo el mal.

Las suplicas y el Corán son la mejor manera para prevenir la maldad de la magia y otras maldades, provisto que uno regularmente se adhiere a decirles con sinceridad y verdaderamente yace sobre Alláh y depende de Él. Ellos también son una gran arma para remover los encantos mágicos después de que sucedan, en adición a humillarse uno mismo ante Alláh pidiéndole a Él remover la maldad y el daño de ustedes.

Hay suplicas auténticas dichas por el Profeta ( صلى الله عليه وسلم ) para curar la
magia y la enfermedad en general, tal como aquella que él usó con su
Compañero: “Allahuma Rab-an-Nas. Adh-hib il-bas wasfi antash-Sahfi, la
shifa-a ila shifauk, shifa-an la yughadiru saqaman” (¡Oh Alláh! El Señor de
toda la gente, aleja el daño, cura (lo de las enfermedades). Tú eres el Único
Quien puede traer cura, no hay cura sino Tu cura, una cura, la cual no deja
ninguna enfermedad; por el Nombre de Alláh, yo busco tratarte). Uno debería
decir esto tres veces.

También la suplica con la cual Yibril acostumbraba tratar al Profeta ( صلى الله
عليه وسلم ): “Bismillahi arqika min kuli shayin yudhik, wa min sharri kuli
mafsin aw aynin hasidin Allahu yashfik, Bismilláhi arqik” (Por el nombre de
Alláh, yo busco tratarte de todo lo que te daña, de la maldad de cada alma u ojo
envidioso; que Alláh te cure; en el Nombre de Alláh yo busco tratarte. Uno
debería decir esto tres veces.

De entre las curas para la magia después de que ello suceda, lo cual es también una cura benéfica para un hombre quien siente que él no puede tocar a su esposa, en una relación sexual, es que uno tome siete hojas de Sidr verde, las estruje con una piedra, las ponga en un plato, ponga agua sobre ellas, y recite sobre el plato lo siguiente:

1.- Ayat-ul-Kursi (Al-Baqarah:255).
2.- Surah Al-Ikhlas:1-4.
3.- Al-Falaq:1-5.
4.- An-Nas:1-6.

En adición a los versos (que hablan) de la magia:

1.- “Y Nosotros revelamos a Musa (Moisés) (diciendo): “Arroja tu báculo, y contempla, ello se tragó toda la falsedad la cual ellos mostraron. Así la verdad fue confirmada, y todo lo que ellos hicieron fue hecho sin efecto. Así que ellos fueron vencidos y retornaron desgraciados” ” (Al Araf:117-119).

2.- “Y Firaún (Faraón) dijo: “Tráiganme a cada hechicero bien versado”. Y cuando los hechiceros vinieron, Musa (Moisés) les dijo a ellos: “¡Echen lo que ustedes quieran echar!”. Entonces, cuando ellos habían echado, Musa (Moisés) dijo: “Lo que han traído es hechicería; Alláh seguramente hará que no tenga efecto. Verdaderamente Alláh no pone recto el trabajo de los Al-Mufsidún (los malhechores y los corruptores). Y Alláh establecerá y hará aparente la verdad por Sus Palabras, por mucho que los Muyrimún (criminales, incrédulos, politeístas y pecadores) puedan odiarlo” ” (Yunus:79-82).

3.- “Ellos dijeron: “¡Oh Musa (Moisés)! O tú arroja primero o nosotros seremos los primeros en arrojar”. Musa dijo: “¡No, arrojen ustedes (primero)!” ¡Luego contemplen! Sus cuerdas y sus bastones, por su magia, aparecieron ante él como si se movieran rápidamente. Así que Musa
concibió miedo en sí mismo. Nosotros (Alláh) le dijimos: “¡No tengas miedo! Seguramente, tú tendrás la mano superior! Y arroja aquello lo cual está en tu mano derecha. Ello se tragará aquello lo cual ellos han hecho. Aquello lo cual ellos han hecho es solamente un truco de mago, y la magia nuca será exitosa, para cualquier monto (de destreza) que ellos puedan conseguir” ” (Ta-Ha:65-69).

Después de recitar esto sobre el agua, él debería beber de ella en tres tiempos y bañarse con el resto. Por hacerlo así, si Alláh lo desea, desaparecerá todo el daño, y no hay daño en repetir esto dos o más veces hasta que él sea curado.

Una de las mejores maneras de tratar los hechizos mágicos es conocer el lugar donde el material usado en el hechizo está oculto, sea en una montaña, el mar o cualquier otro lugar, porque una vez que ello es conocido, puede ser removido y estropeado, y por esto el efecto del derrame mágico desaparecerá.

son algunas de las maneras para protegerse y tratarse uno mismo contra la magia.
Algunos magos desarman el efecto de la magia al ofrecer sacrificios a los
Yinns y hacer matanzas usando sus nombres, y este acto es prohibido, porque
ello es del trabajo de Satán, y esto es un gran acto de Shirk mayor (asociar con
Alláh), así que uno debe estar atento de esto. También es prohibido pedir a un
mago, adivino o agorero para curarse o hacer lo que ellos les ordenen que hagan,
porque ellos son incrédulos, mentirosos y pecadores quienes claman conocer lo
No Visto, y ellos confunden a la gente. El Profeta ( صلى الله عليه وسلم ) advirtió
contra ir ante ellos, preguntarles, o creer lo que ellos dicen, como nosotros
mencionamos al principio de este librillo.

Una vez el Profeta ( صلى الله عليه وسلم ) fue preguntado acerca de An-Nushrah (lo
cual es buscar la ayuda de los magos para librarse de un hechizo mágico debido
al uso de otro hechizo mágico), así que él replicó: “Esto es un acto de Satán”.
(Ahmad y Abu Dawud). Por otro lado, es permitido para alguien el curar a la
gente de los hechizos mágicos por el uso del Corán y las suplicas auténticas de la
Sunnah, como muchos escolares dijeron, tales como Imám Ibn Al-Qayim, que
Alláh tenga misericordia sobre él, y otros.